ICE SCULPTURES

El primer fin de semana del año por Londres ha sido entretenido. Cuando me doy cuenta, llevo demasiados días sin escribir y eso es bueno porque significa que el tiempo me pasa volando.

Después de la primera semana de lab, presentación oral y vuelta a la rutina al fin llegaba el viernes. Tocaba reunirme con Flavia, Marina y Marian a tomar cervezas después del trabajo. Al fin podíamos chrarlar tranquilamente sin el... (en 2 minutos pita mi timer y tengo que ir rapidamente al lab a seguir con el experimento). Cotilleos de clase, fiestas navideñas, chicos, Mallorca... todo tipo de temas acompañados de cerveza y unos buenos nachos. Acabamos la tarde prometiéndonos que lo repeteríamos más a menudo y que teníamos que empezar a hacer ruta por Chipre, Mallorca e Italia. (Hoy ya hemos comprado los vuelos para venir a Mallorca en Junio, seguro que les encantara. Ellas están muy emocionadas y yo aún más).

El sábado había un concurso de esculturas de hielo al este de Londres. Fui con Marian y allí nos reunimos con mis amigas Magda, Marina y las otras au-pair (Carme y Laura, también mallorquinas). Ellas estaban en un centro comercial tomando café y no dudaron al decir que nos esperaban sentadas a que fueramos a ver las esculturas (ellas las habían visto por la mañana). Cuando fuimos a verlas entendimos porque se habían quedado, si Marian dijo 100 veces "it's cold" fue poco. Pero valió la pena, me gusto mucho ver las esculturas, además la zona de Canary Wharf es preciosa con Jubilee Park y el Támesis rodeando. Estuvimos escasamente una hora y volvimos a la cafetería, mis manos caían a pedazos, no las sentía (suerte de mis orejeras que al menos me mantenían la cara calentita). Fuí con urgencia a pedirme el café de siempre del Starsbuck y a esperar a que mi cuerpo volviera a la temperatura correcta. 
Llamó Marina de mi clase que quería venir a ver las esculturas (Marian se tenía que ir) así que me tocó volver a ir a verlas con ella y otra amiga suya que se unió luego. (Mis amigas esperaron mirando tiendas). En el corto periodo de tiempo de tomar el café ya había anochecido y todas las esculturas estaban iluminadas. Esta segunda vez pude apreciar mejor los detalles. Estaba todo muy bonito.

Para redondear el día, fui a cenar con las au-pair a un restaurante que les recomendé y os recomiendo. Es un mejicano que se llama "Desperados" y está en la zona de Angel. La decoración es exquisita, música latina, comida buena y camareros simpáticos. Como el nombre lo requería, nos tomamos un festín de desperados, lo cual animó mucho la noche con fotos de todo tipo. Nos pusieron en una mesa un tanto presidencial, al lado de un autobús y un poco elevada (desde donde veíamos todo el restaurante). Es la segunda vez que voy y espero que no sea la última. 

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El domingo era el cumpleaños de Stephanie así que fui a desayunar con ella y dos más de la residencia a Le pain Quotidien (un restaurante con todo orgánico que me encanta). Que bien sentó ese chocolate calentito con croissant después de sentir el frío de fuera. 

El resto de día, al fin tocaba aplicarse un poquito ya que la entrevista va acercándose. 

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El frío ha llegado a Londres, y tanto es así que esta mañana me he levantado con la ciudad nevada, no ha durado mucho, pero esto ya es un aviso que no se puede salir de casa sin orejeras (es lo mas importante).